Recordando sus años de gloria en los cuadriláteros, tuvimos la oportunidad de platicar con Gerardo Marentes Durán quien hace años se hacía llamar en el ambiente de la lucha libre 'Cavernario Galindo Jr.' y también conocido como 'Latino', personajes que le dieron fama, controversia y hasta en algunos momentos dificultades al estar cerca de perder la vida.
Hoy en día Gerardo Marentes se encuentra postrado en la cama de una de las clínicas del IMSS en Torreón, tras sufrir una embolia que le paralizó parte de su cuerpo, a pesar de ello continúa luchando contra la enfermedad y manteniendo buen ánimo ante esta situación.
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"La verdad vino una doctora y casi me desahució, yo no me he dejado caer, vi morir a un paciente frente a mi cama y vino el sacerdote a darle los santos óleos y me vio y me preguntó si quería que me los diera a mí, le contesté que sí, al dármelos me dijo el padre, te vas a levantar de esta ya verás, y desde ese día me he sentido mucho mejor. Hace unos años la libré de un ataque al corazón, tuve Covid dos veces, dengue dos veces, pero mi cuerpo sigue resistiendo y mi mente aún me hace sentir fuerte".
Gerardo Marentes Durán: rudo desde pequeño
Fue un 4 de noviembre de 1954 cuando nació Gerardo Marentes Durán en Torreón, Coahuila.
“Viví por la Abasolo y calle 9, desde niño comencé en el deporte jugando futbol y estudiaba en la Escuela Coahuila de ese rumbo, siempre fui muy peleonero, por eso dejé el futbol y me fui al box donde me gustaban los golpes. Fue por mi hermana Martha (qepd) que me incliné por la lucha libre ya que a ella también le gustaba echar maromas, hasta que debuté en marzo de 1982 en el Auditorio Municipal”.
Por otra parte, en su vida personal Gerardo Marentes tuvo 10 hijos con cuatro diferentes mujeres y todos le tienen un gran cariño.
“La verdad es que Dios me ha bendecido sin merecerlo, tuve mis vicios, mis altas y bajas, desde niño fui un cabrón, fui monaguillo en la Iglesia de San José con otro amigo y nos robábamos las limosnas, sobre todo cuando un señor de dinero en aquellos años dejaba un billete de 20 pesos, aplicamos la 'burusa' y nos lo gastábamos en chucherías.”
Por su rudeza siempre fue un elemento controvertido en donde se presentará, éstas son dos de esas ocasiones donde estuvo cerca de perder la vida.
“En Cadereyta Nuevo León en una ocasión me enfrenté ante Valente Fernández, antes de la lucha estuvimos conviviendo en su casa, muy buena comida con su familia pero nunca supimos que más tarde nos íbamos a enfrentar en mano a mano. La lucha fue encarnizada y la verdad le puse una severa golpiza, al grado que al culminar la lucha la gente me quería linchar, hubo balazos y tuvo que intervenir la policía para que no me hicieran nada, más tarde fui hasta la casa de Valente Fernández y sus papás me corrieron ya que se quejaban que antes habíamos comido como muy buenos amigos y después le puse una golpiza a su hijo, me corrieron y me dejaron a pie".
"Otra en la Plaza de Toros Torreón cuando me despaché al Gran Davis y al bajar del ring dos sujetos me agarraron y me picaron con pica hielo, la libré de manera milagrosa”.
Su retiro de los cuadriláteros
También luchó con los nombres de 'Latino' y 'Gran Cosaco'. Nunca perdió una lucha de apuestas como Cavernario Galindo Jr., pero el día de su retiro en 2007 se rapó en medio del ring de manera simbólica en la Arena Olímpico Laguna en donde unos de sus rivales más fuertes Stuka I tuvo el honor de cortarle la melena como símbolo de iración y respeto.
En redes sociales se pueden ar para apoyar económicamente a Gerardo Marentes en sus tratamientos, ya que seguirá requiriendo terapias especiales contra la embolia.
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dahh.
