El principal afectado tras el aumento de 25 a 50 por ciento al arancel sobre las importaciones de acero y aluminio, impuesto por la actual istración estadounidense, será el mercado interno de Estados Unidos, de acuerdo con Fitch Ratings.
“Las tarifas recientemente anunciadas por Estados Unidos sobre las importaciones de acero y aluminio aumentarán la volatilidad del mercado de materias primas y las disparidades de precios regionales”, señaló la calificadora.
Agregó que lo anterior podría verse agravado por las probables consecuencias macroeconómicas e implicaciones en la demanda para los mercados de materias primas en general, derivadas de las tarifas generalizadas recientemente propuestas por el país estadounidense sobre las importaciones procedentes de China, México y Canadá, en caso de que se implementen y se mantengan vigentes.
La agencia calificadora señaló que si los aranceles se mantienen durante un periodo prolongado, podrían ejercer presión sobre los márgenes operativos de los consumidores finales de aluminio, como los fabricantes de automóviles y productores de latas de bebidas, debido al aumento de las primas.
Destacó que Estados Unidos es un importador neto de acero, y las importaciones representan alrededor de 18 por ciento de su demanda.
Aunque se está construyendo y poniendo en marcha nueva capacidad doméstica, el país vecino del norte seguirá dependiendo de las importaciones para satisfacer su demanda, siendo Canadá, México y Corea del Sur los principales proveedores.
“El impacto de los cambios en el sistema arancelario dependerá de las posibles exenciones que permanezcan vigentes y de la duración de los aranceles”, comentó.
“Se espera que estas políticas aumenten los precios del acero en el mercado interno de Estados Unidos, beneficiando a los productores locales”,agregó.
Destacó que los precios del acero laminado en caliente del Medio Oeste estadounidense aumentaron un 13 por ciento hasta mediados de febrero respecto a diciembre de 2024. Cuando se introdujeron los aranceles en 2018, los precios se dispararon un 43 por ciento pero cayeron a principios de 2019.
Además señaló que es el segundo destino más importante para las exportaciones de acero de la Unión Europea, representando 14 por ciento de las exportaciones del bloque en 2023. Estas exportaciones estuvieron previamente exentas, y la eliminación de esta exención podría afectar la rentabilidad de los productores europeos de acero.
“Se espera un impacto directo mínimo en volumen por los aranceles adicionales a los productos de acero chinos, ya que el país estadounidense representa menos de 1 por ciento de las exportaciones chinas de estos productos”, dijo.
Sin embargo, señaló que sectores como la electrónica y la energía nueva, podrían enfrentar choques de demanda debido al aumento de la competencia de otras regiones, lo que presionaría el consumo interno de acero en China.
Lo anterior podrá redirigir las exportaciones de acero chino hacia otros países y regiones como India y Europa, lo que podría afectar los márgenes de los productores de acero locales, informó la clasificadora.
En cuanto al aluminio, informó que espera que el mercado del aluminio sea el más afectado, ya que Estados Unidos depende en gran medida de las importaciones de aluminio primario para su consumo interno.
Destacó que en 2024, Estados Unidos produjo 0.7 millones de toneladas de aluminio primario, pero consumió 4.7 millones de toneladas, aproximadamente 70 por ciento de las importaciones provienen de Canadá
“El impacto de los cambios en el sistema arancelario dependerá de las posibles exenciones que permanezcan vigentes y de la duración de los aranceles”, agregó.
“Se espera que estas políticas aumenten los precios del acero en el mercado interno de Estados Unidos, beneficiando a los productores locales”, finalizó la agencia calificadora.