Un par de botas vaqueras de color café es el tan anhelado regalo que espera esta Navidad Miguel Alejandro, un jovencito de 13 años, del municipio de Hidalgo, Nuevo León, que sostiene a su madre invidente.
Actualmente el menor cursa el segundo grado de secundaria, pero desde muy pequeño tuvo que interrumpir su infancia para apoyar en casa y ayudar a su madre, quien hace más de una década perdió la vista y el pasado mes de marzo también la pierna, a causa de la diabetes.
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“Ahora que nos vinimos para acá que le amputaron su pierna pues ya tengo que hacer un poco más de las labores del hogar, como limpiar o así, cosas que nunca había hecho y se me ha complicado, se me ha hecho un poco pesado entre la secundaria a la casa, que esto, y lo otro”, comentó Miguel Alejandro.
La señora Yolanda Sáenz, mamá del niño, señaló que salir adelante con su hijo y la discapacidad que padece ella es muy complicado, debido a que no puede trabajar, y el poco dinero que le llega de la pensión de Gobierno Federal, de tres mil 100 pesos bimestrales y 800 pesos del Estado, realmente no le alcanza para solventar todos los gastos de su hijo, así como los de la casa.
“Pues bendito mi padre Dios, hasta ahorita no nos ha faltado un plato de comida en la mesa, eso es mi agradecimiento con Dios, pero sí es difícil. Trato de estirar el dinerito y gracias a Dios tengo mucha gente alrededor que nos apoya”, mencionó la madre de familia.
Incluso, sus limitantes económicas han hecho que tengan que esperar semanas para cumplirle a su hijo un antojo de comprar una pizza.
“Me dice: ‘Mamá, quiero comer una pizza’, y yo le decía: ‘Espérame hasta que cobre un dinero’, y él se esperaba. Él es muy consciente. Ahora quiere unas botas vaqueras y le digo: ‘Si tú nunca has usado botas’, y él me dice que quiere unas botas vaqueras, y le comento que se espere a que podamos tener y juntar dinero. Ahorita él está esperando para ver cuándo tenemos dinero para comprar sus botas vaqueras”, expresó doña Yolanda.
Para Miguel tener esas botas en color café sería algo que sin duda le traería un poco de luz y alegría tras todo lo que ha pasado con su madre, sin embargo, para él lo mejor de este 25 de diciembre será tener a su madre al lado, ya que el año pasado estuvo internada durante varias semanas y pasó solo los festejos de Navidad y Año Nuevo sin ella.
“Me siento gustoso porque no la tuve el año pasado y ahora sí, a disfrutarla al máximo, se valora más el tiempo teniendo salud porque hay muchas personas que no tienen la parte importante de su familia en casa, y se la pasan mal, pero gracias a Dios ahora que tengo a mi mami, lo valoro mucho. Nunca pensé que iba a pasar esto”, comentó el pequeño.
Algo que podría cambiar la calidad de vida para Miguel y su mamá es una prótesis para la pierna y con esto tener movilidad y continuar apoyando a su hijo.
Si usted quiere y tiene la posibilidad de apoyar a esta familia lo puede hacer con cualquier donativo a la tarjeta Banamex 5256 7834 7582 4794, a nombre de Yolanda Guadalupe Sáenz Torres.
mrg
