El coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira, lamentó que el rechazo del gobierno federal a las observaciones de la Organización de los Estados Americanos (OEA) sobre la elección judicial, al tiempo que cuestionó la legitimidad del proceso por la mínima participación ciudadana y millones de votos nulos registrados el pasado 1 de junio.
Sostuvo por ello que la elección de jueces, magistrados y ministros fue un “tremendo fraude” y el mayor fracaso político de Morena, pues se perdió la oportunidad de mejorar el sistema de justicia en México.
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“Se engañó al pueblo con una elección amañada, con uso de acordeones para manipular resultados y prácticas turbias, como impedir que la ciudadanía contara los votos”, acusó.
En su programa Con peras, manzanas y naranjas, en redes sociales, Moreira afirmó que el proceso estuvo plagado de irregularidades y como ejemplo de ello señaló que el INE mezcló votantes con votos nulos, cuando no son lo mismo.
Adicionalmente, la complejidad técnica de la votación generó una confusión generalizada.
“Con un padrón electoral de 100 millones de ciudadanos, solo 5.2 millones de votos respaldaron al candidato ganador, mientras que se registraron 11 millones de votos nulos y casi 12 millones de boletas en blanco, y a ello se suma un abstencionismo del 87 por ciento del electorado, lo que refleja un claro rechazo de la ciudadanía hacia esta elección promovida por el oficialismo”, dijo.
El legislador priista advirtió que México se encamina hacia un régimen autoritario, dejando de lado la verdadera necesidad del país: una impartición de justicia eficaz con más juzgados, defensores públicos, ministerios públicos, peritos, policías de investigación, laboratorios.
En su turno, el abogado y asesor de la bancada tricolor en el Palacio de San Lázaro, Miguel Ángel Sulub, destacó igualmente la falta de legitimidad de la elección judicial por la escasa participación de los ciudadanos:
“La ciudadanía decidió no participar porque esta elección no mejorará la justicia y, por el contrario, provocará el retraso de miles de procesos y juicios de personas que hoy esperan una sentencia”.
LP